Chicos, les dije antes que con esta Diosa nadie se mete, el hecho de que un mortal me rete es un atrevimiento de gran magnitud y voy a ser muy estricta al momento de juzgarlos, como lo fui con Aracne, y esta es su historia:
Aracne era hija de Idmon, un tintorero, era una muchacha muy famosa en la ciudad de Hipepa por su gran habilidad para el tejido y el bordado, hacía bellos trabajos ... ok, ok, tengo que reconocerlo.
Pero las alabanzas y críticas favorables que recibía por su obra se le terminaron subiendo a la cabeza y se volvió tan engreída de su destreza como tejedora que empezó a afirmar que sus habilidades eran superiores a las MIAS! ... Me enojé mucho pero para que vean que soy buena gente le di a esta niña la oportunidad de redimirse. Adoptando la forma de una anciana, le dije a Aracne que no ofendiera a los dioses niña, no seas atrevida le dije. Ella muy soberbia se burló y propuso un concurso de tejido en el que ambas (YO, Atena y ella) pudiéramos demostrar nuestra superioridad. Entonces me quité el disfraz cual rayo de Zeus, primer plano a mi cara enfurecida y dije: que comience la pelea!
Empezamos a tejer, cada una con nuestra gente apoyándonos, para mi obra, yo me inspiré en mi victoria sobre Poseidón cuando los ciudadanos de Atenas eligieron al patrón de su ciudad, ¿se acuerdan? ya les había contado esto. Pero esta atrevida de Aracne, elaboró un tapiz que representaba nada más y nada menos que los 22 episodios de las infidelidades de los dioses disfrazados como animales, entre ellos los de mi padre! siendo infiel a su esposa convertido en águila, en toro, en sátiro, en mono, en gato hambriento, en gotas de rocío y en todo lo que se puedan imaginar.
Miren, la verdad es que la obra de esta chica, técnicamente, era perfecta, no se le fue ni un solo detalle, pero me enfadé muchísimo!! por la irrespetuosa elección del tema; era como ver una película para adultos hecha hilo ... así que perdí los estribos, y sin pensarlo dos veces le rocié un poco de jugo de acónito el tapiz el cual se convirtió en telaraña y a ella la convertí en araña, condenándole a tejer y tejer por toda su vida, no siendo jamas, pero jamás reconocida nuevamente.
¿Quién quiere ser el siguiente?
Chicos: un bonus! uno de los más grandes pintores Diego Velásquez que vivió en el siglo XVII, representó este mito a través de su obra "Las Hilanderas"
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